Restaurantes en Bari: guía práctica
Descubre los mejores restaurantes en Bari, entre opciones turísticas y auténticas.

Bari, capital de Apulia, es una ciudad frente al mar, rica en historia, cultura y sabores. Al visitar Bari, una de las preguntas más frecuentes es dónde comer. ¿Es mejor elegir un restaurante turístico o uno auténtico? La cocina es una parte esencial de la vida cotidiana. Se come bien en todas partes, pero no todos los restaurantes ofrecen la misma experiencia. La ciudad está llena de locales: algunos pensados para turistas, otros frecuentados principalmente por los baresi.
Los restaurantes turísticos en Bari se encuentran principalmente en el centro histórico, cerca del Castillo Svevo, en la Piazza del Ferrarese, o en el paseo marítimo. Tienen menús multilingües, personal acostumbrado a hablar inglés y a menudo ofrecen los platos más famosos de la cocina pugliese: orecchiette, panzerotti, burrata, pulpo asado. Estos locales son cómodos, a menudo bien decorados y con un servicio rápido. Sin embargo, el precio puede ser ligeramente más alto, y el sabor, a veces, un poco adaptado a los gustos internacionales.
Por otro lado, los restaurantes auténticos se encuentran en zonas menos centrales o en calles secundarias del centro. No tienen letreros llamativos, el menú a menudo está escrito a mano, y el personal puede no hablar perfectamente inglés. Pero aquí se come como comen los baresi. Las orecchiette caseras, el pescado recién pescado, las verduras del huerto, el vino local: todo se sirve con sencillez y pasión. Los precios son a menudo más bajos, y la atmósfera más informal. En algunos casos se trata de trattorias familiares que han estado abiertas durante décadas.
Para descubrir los locales más auténticos, es útil alejarse de las calles principales y observar dónde comen los locales. Barrios como Madonnella, Carrassi o Poggiofranco ofrecen excelentes opciones. También dentro de Bari Vecchia hay lugares auténticos, pero hay que tener cuidado: algunos locales parecen tradicionales, pero están dirigidos a turistas. Un buen indicio es la presencia de pocas mesas, un menú del día escrito en una pizarra, o una larga espera por parte de los clientes locales.
Otra posibilidad es probar la comida callejera. En Bari hay panaderías históricas donde comprar la típica focaccia barese, caliente y crujiente, o panzerotti fritos recién hechos. Estos lugares no tienen mesas, pero la experiencia es genuina y el precio inmejorable. Muchos baresi comen así, especialmente al mediodía o durante un paseo nocturno.
Si buscas comodidad, servicio en idioma y un menú que ofrezca los “grandes clásicos” en versión accesible, un restaurante turístico puede estar bien. Si en cambio quieres sumergirte en la cultura local, aceptando quizás un servicio más lento o una comunicación menos fluida, un restaurante auténtico es la mejor opción. Una buena idea puede ser combinar las dos experiencias: tal vez un restaurante más turístico para una cena con vista al mar, y una trattoria familiar para descubrir los verdaderos sabores de Apulia.
En Bari, la comida es parte integral de la visita. Ya elijas un restaurante turístico o auténtico, será difícil quedar decepcionado. Pero si quieres llevarte a casa un recuerdo realmente único, busca los lugares frecuentados por los baresi: allí encontrarás el corazón de la cocina pugliese.