Estancia en un Trullo
Alojarse en un trullo en Putignano ofrece una experiencia única entre tradición y modernidad, inmersos en la belleza de Puglia.

Putignano es un encantador municipio de Puglia, conocido por su Carnaval, pero ofrece mucho más. Entre sus principales atracciones se encuentran los trulli, antiguas construcciones de piedra seca con techos cónicos, típicas del Valle de Itria. Estos edificios, que en su día se utilizaron como refugios temporales o viviendas rurales, han sido restaurados y transformados en elegantes villas turísticas.
Los trulli de Putignano se encuentran inmersos en un paisaje encantador, a menudo rodeados de olivares centenarios y muros de piedra seca. Algunos trulli conservan su estructura original, mientras que otros combinan elementos tradicionales con diseños modernos, creando espacios únicos y fascinantes. Alojarse en una de estas villas es una experiencia que involucra todos los sentidos, gracias a los materiales naturales y a la atmósfera íntima que se respira.
Las villas-trullo ofrecen un refugio ideal para quienes buscan relajación y autenticidad. Muchas de estas propiedades están disponibles para alquileres cortos y son perfectas para familias o parejas que buscan una escapada romántica. Algunas villas disponen de piscinas privadas, mientras que otras ofrecen espacios equipados para almuerzos y cenas al aire libre, permitiendo disfrutar plenamente de la belleza del campo pugliese.
La ubicación central de Putignano permite explorar fácilmente otros lugares maravillosos de Puglia. A poca distancia se encuentran Alberobello, famoso por sus trulli, Castellana Grotte con sus espectaculares cuevas, y los pintorescos pueblos de Noci, Martina Franca y Locorotondo. También las espléndidas playas del mar Adriático son accesibles en unos 30-40 minutos en coche.
Desde el punto de vista arquitectónico, las villas-trullo representan una fusión perfecta entre tradición y modernidad. Algunos trulli conservan símbolos tallados en los techos, que cuentan historias de tradición y espiritualidad. Los interiores, en cambio, suelen estar equipados con cocinas modernas, wifi y aire acondicionado, garantizando una estancia cómoda.
Los precios para alojarse en estas estructuras varían según la temporada y los servicios ofrecidos. En promedio, se parte de unos 100 euros por noche para una villa básica, pero las estructuras más grandes y equipadas pueden superar los 300 euros por noche. Durante los meses de alta temporada, como julio y agosto, se recomienda reservar con antelación para asegurarse la disponibilidad.
Muchas de las villas-trullo de Putignano se promocionan en portales de alquileres breves como Airbnb y Booking, pero también existen sitios especializados en turismo experiencial que valoran estas viviendas típicas. Alojarse en un trullo significa vivir una experiencia auténtica, lejos de los flujos turísticos masivos y más cerca de la naturaleza y la cultura pugliese.
Quien busca unas vacaciones diferentes, inmerso en el silencio y la belleza del campo, encontrará en estas propiedades una solución ideal. Es una forma de descubrir el territorio de manera más íntima y personal, llevando consigo un recuerdo especial de Puglia. Putignano no es solo Carnaval, sino un lugar donde las antiguas piedras cuentan historias, y donde la hospitalidad se fusiona con el encanto arquitectónico de los trulli. Las villas nacidas de estas construcciones son hoy algunas de las opciones de alojamiento más sugestivas de toda la región.