Bicicleta de Alberobello a Ostuni

Un recorrido en bicicleta de Alberobello a Ostuni entre trulli, olivos y pueblos fascinantes.

Bicicleta de Alberobello a Ostuni

El recorrido de Alberobello a Ostuni se desarrolla a través de un paisaje encantador, rico en historia y cultura. La distancia de aproximadamente 35-40 km ofrece la oportunidad de explorar algunos de los pueblos más fascinantes de Puglia, como Cisternino, Locorotondo y Martina Franca. Estos pueblos, cada uno con su carácter único, son paradas imperdibles para quienes aman la bicicleta y desean sumergirse en la belleza del Valle de Itria.

Partiendo de Alberobello, famosa por sus trulli, el recorrido comienza por carreteras secundarias, a menudo asfaltadas, pero no faltan tramos de tierra que añaden un toque de aventura. La vía más directa pasa por Cisternino, un pueblo caracterizado por sus calles empedradas y casas blancas. Aquí, es posible detenerse para degustar un plato típico o simplemente para admirar el panorama.

Continuando hacia Locorotondo, el ciclista es recibido por un paisaje de olivos centenarios y viñedos. Este pueblo es conocido por sus casas blancas y balcones florecidos, que crean una atmósfera encantadora. Es un excelente lugar para una parada fotográfica, antes de reanudar el viaje hacia Martina Franca.

Martina Franca, con su arquitectura barroca, ofrece otra oportunidad para explorar la cultura local. Aquí, los visitantes pueden pasear por el centro histórico y descubrir las iglesias y palacios históricos. La gastronomía es otro punto fuerte: no pierdas la ocasión de saborear los productos típicos de la zona.

Después de Martina Franca, el recorrido continúa hacia Ostuni, la famosa Ciudad Blanca. La llegada a Ostuni es un momento emocionante, con sus calles blancas que serpentean entre las casas encaladas. El panorama sobre el mar es impresionante y ofrece un contraste espectacular con el verde de las colinas circundantes.

El grado de dificultad del recorrido es moderado, pero es importante estar físicamente preparado. Algunos tramos presentan subidas, y el calor del verano puede hacer que el pedaleo sea exigente. Se recomienda salir temprano por la mañana, especialmente en los meses de verano, para evitar las temperaturas más altas. En primavera y otoño, el clima es ideal para pedalear, con temperaturas suaves y colores vibrantes.

Antes de partir, es fundamental revisar la bicicleta. Asegúrate de que los frenos, las llantas y la cadena estén en buenas condiciones. Llevar una botella de agua, una cámara de aire de repuesto y una bomba es esencial para afrontar el recorrido sin imprevistos. Aunque el tráfico es generalmente escaso, algunas carreteras pueden ser estrechas y sin carriles bici. Usar un casco y ropa visible siempre es recomendable.

Es útil tener un mapa offline o una app GPS con la ruta descargada, ya que en algunas áreas la señal puede ser débil. Ten cuidado con los animales de corral o los perros sueltos que pueden cruzar el camino, desacelerando si es necesario.

Para quienes desean una experiencia más guiada, hay operadores turísticos locales que ofrecen excursiones en bicicleta, incluso con e-bikes. Estos tours a menudo incluyen el transporte del equipaje y asistencia técnica a lo largo del recorrido. A lo largo del trayecto, es posible encontrar masserias, bed & breakfasts y agroturismos donde detenerse para un pernoctar o un almuerzo típico, algunos de los cuales también ofrecen puntos de carga para bicicletas eléctricas.